Reseña #119 - ¿Y si fuéramos nosotros? de Becky Albertalli y Adam Silvera.

¡Hola, icebergs! Hoy os traigo la reseña de una novela juvenil de temática LGBT que ha logrado mantenerme totalmente enganchada a sus páginas por la historia tan especial que esconde en su interior. Espero que os animéis a darle una oportunidad porque merece mucho la pena. Cargando reseña en 3,2,1... ¡Arrancamos! 

Arthur está en Nueva York para pasar el verano, y si Broadway le enseñó algo es que el universo puede poner en tu camino un romance que detenga completamente tu vida cuando menos lo esperas. 

Ben piensa que el universo necesita ocuparse de sus asuntos y dejarlo en paz. Si el universo estuviera de su parte, él no se encontraría de camino a la oficina de correos con una caja repleta de cosas de su exnovio. 

Pero cuando Arthur y Ben se encuentran allí por pura casualidad (o no...), ¿qué es lo que el universo tiene deparado para ellos?

Quizás nada, ya que rápidamente se pierden. Quizás todo, ya que, después de todo, se vuelven a encontrar.

Pero ¿y si no pudieran concretar una maldita primera cita... o una segunda... o ni siquiera una tercera cita? ¿Y si Arthur intentara demasiado que algo funcione entre ellos... y Ben ni siquiera le diera una oportunidad? ¿Y si la vida no fuera como un musical de Broadway? ¿Y si en realidad sí todo sucediera como en los musicales?

Becky Albertalli y Adam Silvera unen sus talentos en esta inteligente, divertida y emocionante historia sobre dos chicos muy distintos que no saben si el universo está intentando unirlos o separarlos para siempre...

Cada vez resulta más fácil encontrar novelas románticas con temática LGBT, solidificando la idea de que el amor no sólo se da entre individuos de diferentes géneros, sino que también surge entre personas del mismo sexo. Además, muchos de estos libros suelen ir dirigidos a un público joven, animándolos a que no tengan miedo a decirles al mundo que se sienten atraídos por sujetos de su mismo sexo, ya que en el amor no importa ni el género ni la edad, lo realmente importante es el sentimiento que logra transmitirse esa persona. Y de emociones que nos traspasan es de lo que trata esta historia, consiguiendo enamorar por completo al lector a la vez que lo hacen los protagonistas.

Este libro se halla dividido en tres partes más el epílogo tituladas respectivamente ¿Y si…?, ¿… fuéramos nosotros?, Y solo nosotros y ¿Y si fueras tú y si fuera yo?. La longitud de cada una de las partes es irregular, siendo la más larga la segunda, después la primera, luego la tercera y finalmente siendo el epílogo la parte más corta. Todas las partes enganchan por igual, ya que resultan muy interesantes. Contiene un total de treinta y ocho capítulos más los dos que vienen sin enumerar en el epílogo. Al inicio de todos ellos aparece el nombre del narrador y la fecha en la que sucede ese capítulo, por lo que en ningún momento nos sentimos perdidos. La extensión de los mismos es desigual, ya que algunos son muy cortos mientras que otros son muy largos, pero aun así ninguno se hace pesado, todos te animan a seguir pasando las páginas dotando a la novela de un ritmo de lectura muy ágil. La narración se da en primera persona tanto por Arthur como por Ben, ellos serán los responsables de contarnos su historia alternativamente, permitiéndonos que los conozcamos con la misma profundidad. Además, en la trama tiene gran importancia los mensajes de texto y los emoticonos, acercándose con este toque mucho más a los jóvenes. Es un libro que cuenta con una estructura muy completa.

Es atemorizante lo fácil que me resulta imaginar un futuro con él. Es atemorizante cómo cada minuto que pasa, algo nuevo me recuerda a él. Nueva York en general me recuerda a él. 

Para mí, Ben es Nueva York. 

Y eso es aterrador.

Es un libro escrito a cuatro manos pero ambas escrituras quedan entrelazadas a la perfección formando solo una. La pluma que fundan los dos autores es muy amena, sentimental y presenta un gran toque humorístico. Su estilo presenta un equilibrio perfecto entre la narración y el diálogo al encontrarse en la misma proporción, proporcionándole mucha rapidez a la lectura. Los diálogos surgen de manera muy natural y espontánea. Además, tienen mucha chispa, no son de un contenido insulso. Las descripciones son detalladas pero relatadas de forma ligera, por lo que en ningún momento se hacen pesadas, son ideales para transportarnos a los lugares dónde se encuentran los personajes. No he probado la pluma individual de ambos autores, esta novela es el primer contacto que he tenido con ellos pero no me han podido cautivar más. Sé con seguridad que volveré a leerlos en un futuro tanto por separado como si se vuelven a juntar, ya que me he enamorado totalmente de la escritura que presentan.

Los personajes principales de esta historia son Arthur y Ben. Ambos están perfectamente creados y definidos, por lo que resulta muy fácil conectar con ellos totalmente. Aunque reconozco que algunos de los comportamientos que tienen a lo largo de la novela no han sido totalmente de mi agrado, ya que yo no actuaría así, pero aun así he podido entender porque proceden de esa manera. Si solo me pudiera quedar con uno de los dos protagonistas, después de pensarlo mucho escogería a Arthur, ya que ha sido capaz de transmitirme una sensación más especial que Ben pero ambos me han gustado muchísimo. Arthur es un joven que le encanta hablar y muchas veces por esta incontinencia mete la pata hasta al fondo pero es un chico que se ofrece totalmente para complacer a los demás. Ben debido a sus circunstancias personales le cuesta mucho confiar en él mismo y sentir que es suficiente para los demás pero cuándo se entrega a otra persona lo hace con todo el gran amor que es capaz de abarcar su corazón. A lo largo del desarrollo de la novela seremos partícipes de la gran evolución que sufren nuestros protagonistas, logrando cautivar totalmente al lector. En cuánto a personajes secundarios tenemos principalmente a los amigos y a los padres de Ben y Arthur. A todos ellos los conoceremos con bastante profundidad, ya que son muy relevantes en la trama. Mis favoritos han sido Dylan y Jessie. Dylan por lo mucho que me ha hecho reír y Jessie por ser siempre tan buena consejera.

La mayor diferencia que he encontrado que tiene esta novela en comparación con otras que he leído de temática LGBT es que ambos protagonistas ya han aceptado y desvelado su orientación sexual a sus seres queridos, por lo que la historia no se basa en que ellos tienen que enfrentarse a su sexualidad como ocurre en otros libros, sino que ya lo han hecho, por lo que este aspecto le suma mucha originalidad a la trama. Además, se le da bastante importancia al daño que puede provocar la homofobia en las personas, enseñándonos que aún existe y que no ha sido capaz ni de desaparecer en las grandes ciudades.

FanArt realizado por Iceberg de papel.

El romance que surge entre los protagonistas es muy tierno a la vez que intenso. Además, el destino juega un papel muy primordial en este amor proporcionándole un toque muy mágico a la realidad. Aunque sí que es verdad que al principio el enamoramiento que se da puede parecer precipitado, pero poco a poco la situación se va acomodando de forma más lenta, ya que hasta que no sienten que se conocen totalmente no se atreven a dar el gran paso. Me he enamorado por completo de la historia de amor tan bonita que florece. 

En esta novela tiene mucho valor la amistad, ya que nos enseña lo mucho que nos puede ayudar sentirnos apoyados y mimados por otras personas, por lo que nos guía a cuidarla cada día para mantenerla. Además, gracias a los amigos de Arthur y Ben se crearán muchas subtramas que proporcionan mucha jugosidad, ofreciéndonos una historia mucho más interesante y entretenida.

De verdad quiero que esto dure para él tanto como sea posible. Nadie comienza una película e inmediatamente quiere ver los créditos, así que cuando esto se termine, espero que mire hacia atrás y lo considere un éxito. 

En esta historia se le da mucha importancia a películas y música muy conocidas, provocando situaciones muy divertidas que conseguirán hacernos reír en muchas ocasiones. Pero a la vez que estén tan presentes en la historia también es un punto negativo, ya que cuándo no conocía a la película o canción de la que se hablaba me sentía muy desubicada dentro de la trama. 

El final que presenta este libro me ha sorprendido mucho porque en ningún momento me lo imaginaba así. Reconozco que no acaba de la manera que yo esperaba pero lo hace de la forma más real y creíble para esta historia, así que es un final adecuado. Aunque a mí se me ha quedado una espinita clavada por no terminar como yo quería y por ser un poquito abierto. 

En definitiva, ¿Y si fuéramos nosotros? es una historia divertida dónde surge un tierno pero intenso romance que se encuentra muy ligado al destino, proporcionándole un toque muy mágico a esta lectura tan realista. Además, se le da mucho valor a lo importante que es la amistad y al daño que puede provocar la homofobia en las personas. También conoceremos a unos personajes que lograrán enamorarnos por completo al ser tan especiales. Al igual que presenta un final que consigue sorprender siendo el más adecuado para la trama. ¡No te lo pienses más y sigue el mismo destino que unió a Ben y Arthur!

Muchas gracias a Puck por el ejemplar.

¿Lo conocíais? ¿Lo habéis leído? ¿Os gustó? ¿Queréis leerlo? ¿Os gustan las novelas de temática LGBT? Contadme.